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 Nos envía Pedro Flores de la Huerga, tesorero de nuestra Asociación de Laborales AULACOR un documento en pdf en el que podemos ver la
EVOLUCIÓN DE AULACOR
El día 13 de Octubre del año 2012 a las 12 horas de la mañana en Alcalá de Henares se firmó el Acta Funcional y los Estatutos de la ASOCIACION AULACOR (fusión de las Asociaciones Alaco y Ulacor). A partir de aquí fue cuando empezó a proyectarse que era lo que queríamos, corregir deficiencias y carencias para el buen funcionamiento de dicha Asociación y orgullo de ser miembro de la misma.
También es cierto que había inquietud y nerviosismo, sobre todo al comienzo. Pasaron unos meses y ya parecía que poco a poco y sobre todo con mucho trabajo por parte de todos los miembros de la Junta Directiva nos íbamos afianzando y se tomaban decisiones importantes.
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 Cuelgo la segunda entrega de las memorias del dominico Juan Manuel Pérez García O.P. (1956-1962), quien fuera el director de la Escuela de Capacitación Social (Colegio San Álvaro) hasta que la clausuraron (1962) a consecuencias de la Semana Social.
Lo publicaré por entregas en las siguentes ediciones de este boletín:
ETAPAS DE UNA VIDA (2)
3.- Actividades.
3.1.- Escuela de Capacitación Social (Universidad Laboral de Córdoba (septiembre 1956-
julio 1963)
En julio de 1956 terminaba yo el segundo año de Ciencias Sociales en la Universidad Laval de Québec (Canadá). Los dos primeros cursos eran comunes a las tres especialidades (Economía, Sociología y Relaciones Humanas) y terminaba con el título de Bachiller en Ciencias Sociales. Al final del cuarto año se obtenía el título de Maestría (equivalente licenciatura) en una de las tres especialidades. Yo no pasé de Bachiller en Ciencias Sociales.
Conmigo estaba el P. Miguel Fraile, que acababa de llegar de Washington, donde había terminado la teología. Se inscribió en la misma facultad que yo, pero no pudo asistir a ninguna clase, porque el provincial le ordenó regresar a España para asumir el cargo de rector de la Universidad Laboral "Onésimo Redondo" de Córdoba. Antes de entrar en la Orden había sido funcionario en el Ministerio del Trabajo con José Antonio Girón como ministro. Girón fue el creador de las universidades laborales y encomendó la dirección de la universidad de Córdoba a los dominicos con la condición de que el rector fuera Miguel Fraile. El P. Fraile me nombró director de la Escuela de Capacitación Social (colegio San Álvaro) adscrita a la universidad. Ante mi objeción de tener que dejar los estudios de ciencias sociales, me dijo que podía convalidar las asignaturas aprobadas y continuarlos en la Universidad Central de Madrid. Viajé en barco desde Québec hasta El Havre (Francia) y desde ahí en tren hasta Madrid.
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 Envía José Antonio Rodríguez Gil un primer programa del encuentro que celebrará su promoción del Colegio Luís de Góngora 1961-1964 en Salamanca:
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 Blog de Enrique Pozón Lobato
PERSONAS MAYORES Y SERVICIOS SOCIOSANITARIOS
El envejecimiento progresivo de la población española ya no es noticia. Las previsiones para el año 2016 hablan de una sociedad con cerca de 9 millones de personas mayores de 65 años (un 18,5% de la población total) con un incremento notable del grupo que tendrá 80 o más años (6,1% de la población).
 Se considera que un 15-20% de la población mayor de 65 años son personas mayores frágiles que precisan una atención específica para los múltiples problemas que presentan, y que para ese año 2016 existirán en España 2.300.000 personas mayores con algún grado de discapacidad para realizar las actividades de la vida diaria.
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 Blog de Manuel García Palacio:
La rana sorda, el elogio y el poder de la palabra
En un post anterior nos hemos referido a la motivación como uno de los factores que mueven a las personas a comportarse de una manera determinada; un estado de ánimo provocado por un estímulo externo o interno que nos empuja a  actuar y que afecta de manera importante a la firmeza de la conducta. Frases a las que añadíamos: ¡¡sentirse bien con uno mismo y con lo que se hace es la base para estar motivado!! Señalábamos que el elogio verbal, sincero, sin florituras, era también una forma estupenda de motivar, aunque insistíamos en que había que “soltarlo” con cuentagotas (o no) en función de la persona que tengamos enfrente.
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