Envía sus datos a través del formulario de la web Manuel Sánchez Aroca (1990-1994). Natural y residente en Martín de la Jara (Sevilla).

Llega un artículo que le pedí el pasado puente en la visita a Toledo a Sergio Coello Trujillo para poder tener de su pluma un recuerdo de la reunión.
Sergio es mejor cumplidor de compromisos que cronista de viajes pero siempre procura reflejar el "fondo" (a ser posible, con buena forma) de las experiencias de la vida.
De todo eso va el artículo que ha preparado sobre este espléndido viaje a Toledo que hemos compartido. Ha preferido hablar del espíritu de este encuentro antes que de nombres y anécdotas

Extramuros

“Cerca del Tajo, en soledad amena,
de verdes sauces hay una espesura,
toda de hiedra revestida y llena
que por el tronco va hasta la altura
y así la teje arriba y encadena
que el sol no halla paso a la verdura;
el agua baña el prado con sonido,
alegrando la hierba y el oído.”

(Garcilaso de la Vega)

Aunque Toledo ya no es exactamente el mismo que cantara su hijo Garcilaso de la Vega, sigue conservando esa mezcla de fortaleza y vega extensa, de aleación entre la piedra quieta y el agua en movimiento que lleva hasta el mar que no es necesariamente el morir, como insistía otro ilustre poeta, Jorge Manrique.

Ya se sabe, los poetas disponen de libertad imaginaria ─la más potente de todas─ y Garcilaso y Manrique lo eran de sobra. Tenían licencia para ver una primavera florida donde otros sólo alcanzamos a contemplar esa balada nostálgica del otoño con sus hojas secas caídas por el suelo y sus choperas de crestas amarillas.

Pero los poetas, salvo Homero ─que perdió la guerra de Troya─ y John Milton ─que perdió el Paraíso─ no están ciegos. Ni tuertos como el profesor Ortega; aquel paisano suyo que en los primeros años sesenta del siglo pasado nos daba Formación del Espíritu Nacional a los “laborales” de Córdoba en Segundo Curso de Oficialía Industrial. Recuerdo su eterno esparadrapo blanco en el ojo izquierdo ─que no era político sino estético─, sus amenazas en broma a toda la clase ─“mis ceros no son como los de los demás profesores, son tan grandes que tendréis que llevarlos rodando con una guía, como si fueran aros”─ y la expresión “toledano, tonto y vano; si lo sabré yo”; auténtica “prueba del nueve” de su honrado sentido del humor; que el humor bien entendido, como la caridad, siempre debe empezar por uno mismo.

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Localizo a Gregorio Carretero Expósito (1961-1963). Nació y reside en Malagón (Ciudad Real). Su hermano Juan Miguel también estuvo en la UNI. Recuerda con cariño al que fue director de su colegio, el padre José Luís Zabalza con el que ha contactado tras casi medio siglo.

Actualizo el enlace en la web de Carlos Felipe Marina Burgos (1960-1965), al cual he tenido ocasión de conocer el pasado fin de semana en Toledo, donde reside:

Localizo en Hospitalet de Llobregat (Barcelona) a Servando Grande Novoa (1956-1960). Natural de Macedas (Ourense), me pide que le ponga en contacto con Inocente Esteban Teba (1956-1963), muy amigos de la época.

Se inscribe en la Asociación Ulacor con el número 337 Cristóbal García Granados (1973-1978). Es natural y residente en Arboleas (Almería):

Envía sus datos para la web Juan Francisco Aguado Merlo (1984-1988), natural de Pinos del Valle (Granada) reside en Madrid:

Envía sus datos para la web Francisco José Ortega Ortega (1979-1980), natural y vecino de Torredonjimeno (Jaén):

SALUDOS A TODOS LOS COMPAÑEROS, Y AUNQUE YO DEJÉ LA LABORAL EN 1º DE BUP GUARDO RECUERDO MUY BONITOS DE CORDOBA Y CHESTE.

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